martes, 10 de julio de 2007

Ánimo

Yo no quiero que mi ánimo dependa del clima. Tampoco del saludo matinal o de mi desayuno. NO quiero que dependa de los posteos que encuentre en internet o de los mensajes en mi correo electrónico. No quiero que dependa de mi trabajo o de la rutina, ni de las llamadas que no he recibido o los saludos que no contesto. Tampoco de mis compañeros ni de mis jefes. NO quiero que dependa de las cuentas del banco o las por pagar. Yo no quiero depender de nada, por favor, de nada, de nada.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

De nada, la verdad es que tu blog es super entrete. No es en mala onda lo que digo, pero creo que eres super ironica y eso hace que tus publicaciones sean entretenidas de leer.

Bueno espero seguir leyendo tus publicaciones y trataré de dejar algo de las cosas que escribo...
saludos

Anónimo dijo...

"Voy pensando... analizando... bosquejando respuestas para preguntas que aún no se han realizado... voy siempre un paso adelante sometiendo el sentir al pensar... olvidandome del hoy y viviendo el mañana.. como parar esto... como callar un poco esta otra parte de mi... que me lleva a cuestionar mis actos continuamente... como quitarme esta mascara de eterna pensadora y devolver el color a mis mejillas...
quiero ser parte de un continuo en movimiento donde mi corazón sea el protagonista y la mente quede bajo siete llaves olvidada en un cajón de la memoria..."
Saludos

Cristobal Vargas dijo...

es simple.
se cortan los flujos que
te conectan con el mundo...
se obturan... se pliegan...
y se hace una makina
sin exterior, sino que pura contencion de intensidades
variables... grados; frio,
calor, dolor...
y el deseo... queda como
una pelota de calcetin... y
ahi tu juegas con ella...