jueves, 5 de noviembre de 2009

Renovación

A veces busco renovarme, pero no me resulta mucho, aún así lo intento y me siento bien cuando logro un porcentaje de alegría en mi vida.

lunes, 26 de octubre de 2009

MI bipolaridad

Suelo dar a conocer todos mis proyectos y sueños con naturalidad, la gente me escucha, comprensible, sabiendo que, en el fondo, es otra de las tantas cosas que no cumpliré. Soy tan dispersa que un día quiero negro y al otro día quiero blanco. Un día tomo café y al otro día solo quiero té. Dejo de comer carne y luego me vuelvo una carnívora. Un día quiero ser una gran periodista, otro día me da lo mismo y al diablo las malditas comunicaciones, los escritos perfectos, el hablar adecuado y toda la mierda periodística. A veces quiero enseñar, pero luego no quiero más alumnas en mi vida. Quiero aprender, pero después no tengo ganas de saber nada más.
A veces creo que soy bonita, pero luego siento que tengo rasgos duros, grandes, soy morena y no tengo color en mis mejillas. Otras, quiero vestirme hippie, olvidarme de los pantalones, de los rollos, pero luego me siento que no encajo y me abstengo. Así como siento que no encajo en ningún lugar que frecuento.
A veces quiero hacer un largo viaje, pero solo tengo mi imaginación para concretarlo. También suelo decir que no iré más al doctor, pero ahí me tienen, con las plaquetas bajas y con miedo al porqué de esta situación.
Y más encima escribo, pensando que soy leída, sin embargo, escribo, para, por último, sentir que, todo lo que pienso en el día, lo concreto aquí, en este espacio multisensorial.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

D o l o r e s

Ya no escribo tanto como antes, a pesar de que las mismas inquietudes ansiosas y de malestar general me acompañan todo el día. Los mismos fantamas, los mismos miedos, las mismas risas, las mismas mañanas, tardes y noches. A veces pienso el los "y si..." y evoco otras realidades, cosas que pudieron haber sido, alternativas, etc, que ya no vienen al caso porque lo que fue ya fue.
Pienso en el amor y sonrío cómplice. Me río de las faltas de ortografías que siempre me topo en otros blog, de las faltas de coma y las pausas, como si fueran escritos con una ansiedad descontrolada. También me rió de los comentarios y de las frases que intentan ser inteligentes o entretenidas, que buscan decir algo ingenioso y que, la mayoría de las veces, están de sobra.
Tengo menos amigas, pero creo que eso no vale mucho, los que tengo, me quieren y me entienden al derecho y al revés.
Voy menos al doctor, no tomo remedios y rezo más. Me molesto un poco menos y disfruto más del día a día, no, eso está demás, casi siempre se me pasa el día quejándome. No he olvidado mis ataques de pánico y aún quiero salir del metro cuando ya estoy en el vagón. También como más despacio pensando que me atragantaré con la comida, y todavía no supero mi trauma de comer pescado sin que salga una espina.
Tengo una talla más, pero eso no me deprime, es más, creo que me favorece. Sigo pensando que algún día tendré un trabajo genial, una casa bonita, una bicicleta con canasto y alegría por la vida.
Sigo teniendo algo muy especial con alguien que me ama y creo que todo no vale nada si no estuviera con él, ni siquiera esto.
Sí, a veces, como la mayoría de los nostálgicos, soy feliz y escribo.

viernes, 28 de agosto de 2009

Actualización

Decidí actualizar este blog para que no quede obsoleto: Y no ha pasado nada.

miércoles, 24 de junio de 2009

En el metro

Me carga la señora que se para al lado tuyo para que le des el asiento.
Me cargan los que suben escuchando música a todo chancho y tienes que escucharla obligadamente.
También me carga la vieja que grita porque subió una embarazada y alguien debe darle el asiento, obvio que lo hace porque está de pie, en otras circunstancias no daría su asiento.
Me cargan los que se quedan en la puerta y no te dejan bajar hasta que les gritas "permiso".
Me molestan los que no se corren, los que te miran con odio, los viejos con care calientes.
Me cargan las mamás que no le enseñan al cabro chico que debe dar el asiento.
Me molestan los peleadores, los que siempre dicen algo fuerte para que todos escuchemos, los que corren sabiendo que es peligroso hacerlo, los que se pasan la línea amarilla, los que se sientan en el suelo.
Me cargan todos los que toman el metro porque olvidan modales, educación, respecto, privacidad y libertad.
Me carga el metro.

lunes, 11 de mayo de 2009

Típico

Escucho conversaciones pero solo oigo algunas cosas; marcas de ropa, tipos de dietas, picadas de zapatos y otras tonterías, yo solo miro a mis interlocutoras y, una y otra vez, me cuestiono qué hago aquí. Pienso en que soy una "freak" entre todas estas chicas que son mis "amigas" pero que ninguna estuvo en mi cumpleaños. Me siento rara e incómoda, como siempre. Sé que deben pensar que soy una extraña y porqué estoy con ellas, sobre todo cuando me miran esperando que acepte sus opiniones sobre otras "amigas" que no están presentes. He movido todo el rato la cabeza diciendo a todo que sí. Nada me llena en este momento, ni siquiera el segundo pisco sour. Si tuviera fuerza de voluntad me pararía y me iría, pero no soy capaz y puedo aguantar otra hora más de conversaciones inútiles, pelambres estúpidos y situaciones graciosas, porque hay que ser parte, o si no, me tildarán de loca desquiciada.

miércoles, 29 de abril de 2009

Cristina

Me encanta esta canción... y todas las canciones de Cristina, sola o acompañada, junto a Sonic Youth o Nacho Vega, me da igual.

http://www.youtube.com/watch?v=Iwo107w8fG4

jueves, 16 de abril de 2009

Pelea interna


Mi cerebro está en constante pugna con mi corazón. Últimamente no se llevan muy bien, y sus continuas peleas me tienen con taquicardias y dolores de cabeza. Algo anda mal entre ellos dos, no sé si será envidia, celos o simplemente son incompatibles. Yo los quiero a los dos, a pesar de que cada uno de ellos me ha hecho daño: el corazón me ha traicionado y me ha hecho sufrir con su sentimentalismo y sus continuas penas ante la vida; el cerebro me ha hecho actuar de forma racional, fría, calculadora, tan sensata que me he equivado en ciertas decisiones.

Yo no quiero que mi cerebro y mi corazón peleen más. Quiero que se hagan amigos y se complementen. Tienen permiso para ir a fiestas, tomarse un copete, carretear hasta tarde y pasarlo bien, pero, por favor, no sigan peleando más!

martes, 31 de marzo de 2009

¿Puedo?


Mantequilla

A veces, sobre la mesa hay gran variedad de jamones y quesos, exquisitos patés y mermeladas por doquier, sin embargo, sigo prefiriendo el pan con mantequilla.

miércoles, 11 de febrero de 2009

Apuesta, no certeza.

Pensando en escribir sobre el amor sin ser cursi, repetitiva o típica, me topé con un escrito de una periodista llamada Paula Escobar: "Un amigo sacerdote dice que en la Biblia no hay una sola palabra para el amor, sino que dos: Eros y Ágape. El primero es el amor-posesión, el de querer al otro para que el otro me dé ciertas cosas, un querer centrado en uno mismo. Ágape, por el contrario, es el amor volcado en la felicididad y bienestar del otro. Un amor que es apuesta por el otro, por hacerlo protagonista de la propia vida. Apuesta y no certeza: así parece ser el amor verdadero".

He caído mil veces en ser un Eros cualquiera y, aunque no sabía de la existencia de Ágape, se ha convertido en mi meta para este año. Y no solo en el amor de pareja, si no que también en aquel amor tan especial de la amistad y la familia.

Esta es la confesión más lúdica que he hecho.

jueves, 22 de enero de 2009

A veces

Uno quiere escribir tantas cosas y te imaginas frases geniales, situaciones extraordinarias, pero luego, te sientas y nada sale, como hoy.

miércoles, 7 de enero de 2009

Cosas que me dan esperanza

-Escuchar a Manuel García (a pesar de sus letras tristes...)
-Comer helado de chocolate.
-El viento rico que corre después de las 8.
-La preocupación de mi amiga y sus múltiples recuerdos de detalles de mi vida.
-Mi perrita y su constante movimiento de cola.
-La televisión apagada.
-Mi padre contándome sus historias de niño.
-Mi madre contenta.
-Noticias positivas.
-Cuando me tomas la mano de improviso.
-Pensar en ti y mirarte a los ojos.