jueves, 8 de mayo de 2008

Mirar

Prefiero mirar de reojo las cosas. Asi me evito enfrentar tantas cosas que ni siquiera quiero ver. Pero a veces no me resulta y miro de frente y mi vista se encandila y suelo ver difuso. Tampoco me gusta cerrar los ojos, necesito ver, pero no todo, solo algunas cosas. Pero tampoco puedo elegir que ver; las personas se aparecen así, de repente, y uno no puede hacer nada más que mirar, observar, seguir mirando y, si se quiere, cerrar los ojos o dar la vuelta.

No hay comentarios: